7 de agosto de 2011

Reflexión... ¿Satisfacen los halagos cuando se plagia?

Hola chicas...

Nunca pensé que tuviera que dedicar una de mis entradas a hablar de este tema tan desagradable y tan extendido por desgracia en este mundo bloggero...

Las que me seguís desde hace tiempo sabéis que disfruto creando cosas, dándole vueltas al coco, pensando y repensando qué hacer y cómo hacer nuevas cosas y sobre todo, cómo ser ORIGINAL. A veces una simpleza me puede llevar horas pero me puede más la satisfacción de crear y ver el resultado de lo que se cuece en mi cabeza que la pieza en sí. De hecho, es ese sentimiento el que me hace valorar las obras de los demás y a la vez, tener pavor a copiar las obras ajenas.

Esta vez me ha tocado a mí. El viernes vi una copia de uno de mis broches en el blog de una seguidora... seguidora reciente y que no se imagina la satisfacción que me reportó leer los comentarios de amigas y compañeras bloggeras cuando publiqué mi broche allá por el mes de abril... Y es esta reflexión la que me lleva al título de la entrada... ¿Satisfacen los halagos cuando se plagia? ¿A qué saben esos piropos a la falsa originalidad? ¿Realmente compensa?

Yo por mi parte pienso seguir disfrutando de mi inagotable imaginación, del buen sentimiento que me genera crear y exponer mi trabajo en este humilde rinconcito protegido...

Emulando a mi adorado Sabina sólo me queda decir, coincidiendo con la fecha en que mi broche salió de mi imaginación...

¿Quién me ha robado el mes de abril? / Lo guardaba en el cajón / donde guardo el corazón...


Un besazo